MIENTRAS SIGAS VOLANDO.
Alan Bean, ex.astronauta del programa espacial Apolo, cuenta que cuando la nave Apolo 12 despegó fue alcanzada por un relámpago. La entera consola de mando a bordo de la nave espacial empezó a brillar con luces de advertencia color naranja, y de peligro, color rojo.
Hubo la tentación entre la tripulación de “ ¡ Hacer algo ¡ “ Pero los pilotos se preguntaron entre sì , “¿ êsta cosa sigue volando en la misma direcciòn ? ”. La respuesta fue un unànime si – seguìa en la direcciòn a la luna.
La tripulaciòn dejò que las luces siguieran brillando en el panel de control mientras evaluaban los problemas individualmente, y observando como las luces naranja y rojas empezaban a apagarse una por una. Los aviadores de prueba tienen lo que llaman una “ prueba de àcido “ para evaluar problemas en sus aeronaves. Cuando algo malo pasa, ellos siempre preguntan “ ¿ Esta cosa sigue volando ¿ “ Si la respuesta es si, entonces no hay peligro inmediato, no hay necesidad de reaccionar en forma exagerada.
REFLEXION.-
Cuando estamos en una crisis y las luces de pànico empiezan a parpadear como si se hubieran vuelto locas, a menudo nos sentimos tentados a “hacer algo” al respecto. Pero antes de hacer algo, tome tiempo para pensar bien las cosas. Pida a Dios que le indique Su tiempo. Pida a Dios que aclare su mente para que pueda procesar lo que està pasando.
Mucha gente en medio de las crisis actùa y luego piensa. Un esposo, por ejemplo, decide abandonar su hogar intentando asì ser decisivo. Un líder en los negocios y otros en su oficina renuncian enojados, sin considerar las consecuencias de sus actos.
Durante el ministerio de Jesús en la tierra, Pedro enfrentò varias crisis por actuar impulsivamente o hablar sin primero pensar en las cosas. ( “Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que dice”). Todos hemos hecho esto. Por alguna razòn, en medio de una crisis, sentimos necesidad de hacer algo aquì y ahora. Pero esto casi siempre no es el movimiento màs sabio. (“ El peor consejero es la desesperación”). La sabiduría a menudo significa actuar lentamente.
Cuando usted enfrente una crisis, vaya a Dios y pìdale pensamientos sabios, pìdale palabras sabias. Mark Twain el narrador estadounidense dijo una vez, que la diferencia entre la palabra correcta y la casi correcta es la diferencia entre la luz de un relámpago y la luz de una luciérnaga. En otras palabras, es una gran diferencia. Lo que digamos y hagamos en medio de una crisis realmente es importante.
“SI TODAVIA ESTA VOLANDO, PRIMERO PIENSE, LUEGO ACTÙE”
“Con la lengua bendecimos a nuestro Señor y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que han sido hechos a la imagen de Dios; de la misma boca proceden bendiciòn y maldición. Hermanos mìos, esto no debe ser asì” (Santiago 3:9-10)
Nuestras acciones y palabras cuando no pensamos y meditamos completamente en los problemas o crisis que se nos presentan tienen el poder de herir a otros por mucho tiempo. Dios puede ayudarnos a decidir y actuar correctamente si se lo pedimos. Sin importar donde te encuentres en tu jornada espiritual, detente ahora mismo y pide Dios que te de dè pensamientos y palabras sabias, amables, meditadas ante las crisis que enfrentaràs hoy.
martes, 16 de diciembre de 2008
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